Benetússer inicia la temporada de control de plagas de mosquito

El Ayuntamiento de Benetússer, a través de su área de Medio Ambiente, ha dado comienzo a la temporada de control de plagas de mosquito en los espacios públicos del municipio. De este modo, a través de un tratamiento con larvicidas centrado en imbornales, sumideros o fuentes, así como en otras zonas de acumulación de aguas, se trabaja para la prevención y proliferación de este tipo de insectos tan molestos, especialmente en el caso del mosquito tigre, que hacen su aparición durante la última fase de la primavera y los meses de verano. Este tratamiento, consistente en la aplicación de un polímero, impide que la larva del mosquito llegue a fase adulta cortando de raíz la evolución del ciclo vital del insecto. “Desde el ayuntamiento ponemos ya en marcha todos los protocolos contra el mosquito con el objetivo de frenar su proliferación ya que la prevención ha demostrado ser la mejor de las estrategias para controlar su presencia en nuestro municipio”, señala la concejala de Medio Ambiente, Dolors Tarín.

 

Además del control directo en espacios públicos, la experiencia adquirida a la hora de controlar las plagas de mosquitos demuestra que el papel de la ciudadanía es también crucial para poner freno a su expansión. De este modo, el consistorio lleva a cabo cada año campañas de concienciación para promocionar todo tipo de acciones que prevengan la proliferación de focos en espacios privados. Grifos mal cerrados, maceteros, juguetes, depósitos de aire acondicionado, etc., pueden ocasionar el estancamiento del agua, un contexto idóneo para la reproducción del mosquito, especialmente la variedad tigre que solamente necesita una pequeña cantidad para poder criar. Bajo este prisma, son importantes acciones tales como evitar la creación de zonas encharcadas, renovar cada dos o tres días el agua de los bebederos de mascotas, tapar los huecos de los árboles, y mantener limpios lo desagües. También es importante tapar con telas las mosquiteras y espacios como fosas sépticas, y dejar correr el agua, al menos una vez por semana, en los sumideros o imbornales de terrazas.

 

Estas acciones que aúnan los esfuerzos públicos y privados, se complementará en los próximos meses con un tratamiento ecológico aplicado en árboles y setos de las zonas ajardinadas del municipio para reducir y controlar la población de insectos que puedan suponer molestias para las personas que frecuentan estos espacios.