Burjassot, escenario de la presentación de la campaña Som de barri, de ciutat, de botiga i de mercat, de la Diputación de Valencia

El Ayuntamiento de Burjassot ha sido uno de los cuatro municipios escogidos por la Diputación de Valencia para la presentación de la campaña Som de barri, de ciutat, de botiga i de mercat, cuyo principal objetivo es fomentar el comercio de proximidad poniendo en valor uno de los elementos que más acercan el comercio a la sociedad valenciana: la lengua propia.

La presentación de la campaña ha tenido lugar en el Salón de Plenos del Consistorio y ha contado con la presencia del alcalde de Burjassot y vicepresidente de la Diputación de València, Rafa García; de la diputada de Normalización Lingüística, Dolors Gimeno; de la concejala de Promoción del Valenciano, Manuela Carrero; de la concejala de Promoción Económica, Rosa Coca, y de una nutrida representación del Equipo de Gobierno. También han estado presentes los presidentes del tejido asociativo comercial de Burjassot como son Dolores Bueno, presidenta de CODEMER y Pedro Soriano, presidente de la Asociación de Comercio y Servicios y de Empresaris Burjassot.

La campaña, que pone como ejemplo el sentimiento de familiaridad que un cliente puede sentir al escuchar un “Bon dia!” al entrar a una tienda, pretende que también cale la idea de que hablar de comercio local no es solo una cuestión de pueblo, sino también de ciudad, que al fin y al cabo, está integrada por cada uno de sus barrios. De ahí viene parte del lema “som de ciutat” que integra el nombre de la campaña y la elección de Burjassot, como lugar clave por su localización en la primera línea metropolitana de València. Y es que Burjassot tiene esencia de ciudad por su tamaño y división en barrios, pero no pierde por ello la esencia de pueblo que garantiza la proximidad en el comercio, que hace que el trato sea exclusivo y el producto inmejorable. Y lo mismo ocurre, según esta campaña, con el valenciano. Burjassot, por su proximidad a la gran ciudad, cuenta con gente de nacionalidad e idiomas muy diversos, pero a la vez mantiene muchas familias valenciano hablantes que son la esencia originaria del municipio y que transmiten esa sensación de proximidad, de estar en casa.

La campaña Som de barri, de ciutat, de botiga i de mercat se ha materializado en más de 125 carros de la compra y 60 bobinas de papel de envolver con que la Diputación de Valencia ha obsequiado al Ayuntamiento de Burjassot para que éste, a su vez, los haga llegar, por un lado, a los negocios ganadores de los II Premios al Uso del Valenciano en el Comercio, celebrados recientemente y también presentes en la presentación de la campaña y, por otro lado, a las asociaciones locales que integran comercios de proximidad, las cuales los sortearán como parte de sus campañas de Navidad.

Tanto el diseño de los carros como el de las bobinas de papel tienen un toque urbano pero sin perder la esencia de barrio y de proximidad que quieren transmitir. Se trata de materiales de mucha calidad que solo han llegado a poco más de diez ayuntamientos, siendo el de Burjassot uno de ellos por haber sido pionero en el impulso a los Premios al Uso del Valenciano en el Comercio, con la subvención que ofrece Diputación de València, desde hace dos años. De entre éstos, la presentación de la campaña se ha llevado a cabo solo en cuatro ayuntamientos, tres de los cuales son pioneros desde el primer año que se organizan los Premios.

La presentación de la campaña, sin perder su carácter institucional con los discursos de la diputada de Normalización Lingüística, Dolors Gimeno, que dirige la Unidad de Normalización Lingüística de la Diputación y el alcalde de Burjassot, Rafa García, tuvo un toque muy distendido con la presentación y actuaciones de María Juan i María Zamora, dos de las cómicas más reconocidas actualmente en el panorama valenciano. Su actuación, junto con el rap que la Diputación pondrá al alcance de todo el mundo como spot publicitario y que pone música a la campaña, entretuvieron a todos los presentes que asistieron al acto, durante una hora llena de risas, bromas y buen rollo.