Cómo sobrevivir a un piso pequeño en Sevilla

Organización y mobiliario multifuncional

El primer paso para sobrevivir a un piso pequeño en Sevilla es optimizar el espacio disponible. Hay que centrarse en dos aspectos clave: la organización diaria y la elección de mobiliario inteligente.

Decluttering: deshacerte de lo innecesario

Antes de pensar en el mobiliario o la decoración, conviene deshacerse de algunas de nuestras pertenencias. Es el momento de hacerse preguntas difíciles: “¿lo usé este último año?”, o “¿me aporta felicidad?”. Si la respuesta es que no, es el momento de donar, vender o reciclar estos objetos.

Muebles multifuncionales y de líneas sencillas

En lugar de saturar el piso con muebles grandes, es mejor usar piezas sencillas que cumplan más de una función. El mejor ejemplo es el sofá cama o futón, que puede ser un lugar cómodo para leer o ver la tele durante el día, pero también convertirse en una cama sin tener que ocupar siempre espacio.

En ese sentido, otra alternativa bastante interesante son las camas con almacenamiento. Existen somieres con cajones integrados o canapé abatible, lo que ayuda a maximizar el bajo cama. Aquí se pueden guardar estanterías de temporada, ropa de cama extra o incluso equipación deportiva que no se use a diario.

Distribución inteligente de zonas

Delimitar distintas zonas dentro de un piso pequeño puede hacer que parezca más amplio y esté mejor organizado. Un simple biombo o una estantería baja pueden separar visualmente el salón del dormitorio o la cocina del salón sin restar luz, por ejemplo.

Adaptación del estilo de vida y aprovechamiento de la ciudad

Un piso pequeño en la capital andaluza no debería limitar tu disfrute de la ciudad… de hecho, quizás te ayude a vivir mejor el estilo de vida local.

Aprovecha sus espacios públicos

Sevilla tiene un clima privilegiado la mayor parte del año, por lo que pasar tiempo fuera de casa será una delicia. Aunque tu piso sea modesto, considera las terrazas compartidas o azoteas comunitarias, que ya pueden existir en tu comunidad. Pregunta en tu bloque y podrás tener tu mesita y tus sillas plegables para desayunar al aire libre sin tener un gran balcón propio.

Los parques y jardines municipales, como el Jardín de Murillo; o las alamedas del Guadalquivir, son lugares perfectos para instalar una mesa de picnic, leer o hacer deporte. Esto reduce la necesidad de tener un rincón de lectura o una zona fitness dentro de tu hogar.

Un buen terraceo cuando cae la tarde en barrios como Triana, la Macarena o Santa Cruz puede ser interesante y es muy típico. En una terraza podrás socializar y descansar sin sentir que tu piso es el único centro de tu vida social.

Si no eres de salir tanto de casa y tampoco quieres deshacerte de tus cosas, aún tienes una opción extra. Al ser Sevilla una ciudad bastante grande, cuenta con servicios de alquiler de trasteros para cualquiera que lo necesite. Entra en alguna de las plataformas para encontrar unos trasteros de alquiler en Sevilla y un problema menos.

Reducir y simplificar el guardarropa

Un armario compacto no es excusa para salir a la calle con la misma ropa cada día: lo importante es construir un “fondo de armario cápsula”. Lo suyo, por cómo es Sevilla, es optar por prendas ligeras y de secado rápido, a ser posible con tejidos transpirables que no ocupen demasiado espacio y se puedan lavar con frecuencia.

Cocinar sin agobios

La cocina en un piso pequeño puede resultar claustrofóbica si no está bien equipada. Para las residencias de menor tamaño, lo suyo es incorporar electrodomésticos compactos y multifunción. Un microondas con función de horno, una placa de inducción portátil, una nevera con congelador integrado… son opciones que brindan flexibilidad.

Además, será conveniente hacer cocina de temporada y con productos locales. El Mercado de Triana, el de la Encarnación o el callejero de la Feria ofrecen ingredientes frescos que puedes comprar a diario sin tener que almacenarlos. Finalmente, una fila de ganchos o rieles sobre la encimera sirve para colgar cucharones, espátulas o pequeñas cacerolas, no ocupando espacio en cajones que pueden servir para otras cosas.