Paterna colabora en un estudio del IATA-CSIC sobre la capacidad de contagio y transmisión de la COVID19 en la población escolar

Con el objetivo de obtener más información sobre el riesgo de infección y protección frente al coronavirus de la población pediátrica y su capacidad de transmisión, el Ayuntamiento de Paterna está colaborando con el Instituto de Agroquímica y Tecnología de Alimentos del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (IATA-CSIC) en un Estudio piloto denominado Predicol. El estudio está apoyado por la Plataforma Salud Global del CSIC.

El estudio, al que ya se han incorporado500 niños y niñas voluntarios/as de entre 3 y 16 años de 10 centros educativos de Paterna asintomáticos y que no hayan pasado el coronavirus y que irá agregando a más voluntarios, investiga el microbioma intestinal de los menores, que es el conjunto de microorganismos y genes que se encuentran en el tracto digestivo y que regulan la respuesta del sistema inmunitario y puede influir en el riesgo de sufrir infecciones, así como en la efectividad de las vacunas.

A este respecto, el Alcalde de Paterna, Juan Antonio Sagredo ha señalado que “esta investigación, a la que ha reaccionado de forma muy positiva nuestra comunidad educativa, es una oportunidad para que los estudiantes de Paterna estén evaluados científicamente durante todo el curso y sirvan de base para un estudio internacional” al mismo tiempo que ha destacado que “la colaboración entre la administración pública y el sector científico nos permitirá aprender más sobre el virus, generando y fortaleciendo alianzas ante esta lucha común”.

Por su parte, Yolanda Sanz, profesora de investigación del IATA-CSIC, indica que “esta colaboración entre el CSIC y la comunidad educativa de Paterna representa una oportunidad única para avanzar en el conocimiento de la infección por el coronavirus SARS-CoV-2 en niños de diversas edades y, así, entender mejor los factores que explican su distinta susceptibilidad, ayudando a la toma de decisiones en el ámbito escolar y familiar”.

Con esta investigación, el CSIC-IATA persigue varios objetivos. Por una parte, propone identificar las características diferenciales del microbioma intestinal de la población pediátrica que puedan proteger frente a la infección por el SARS-CoV-2 o aumentar su vulnerabilidad y así identificar a los sujetos de riesgo y predecir la incidencia de la infección. Conocer con más precisión la capacidad de los niños de transmitir el virus en el entorno escolar y familiar. Y conocer el impacto de la pandemia y variables estudiadas en el desarrollo educativo de los niños y niñas.

Todo ello con el fin último de identificar nuevos marcadores biológicos que ayuden a anticiparnos en la implantación de medidas sanitarias y de protección reduciendo la transmisión de lvirus y el impacto social de la infección en el entorno educativo y familiar.

A lo largo de todo el curso escolar, a los menores participantes en este proyecto, y en el que también están involucradas sus familias, se les hace un seguimiento exhaustivo tanto por vía telefónica como a través de visitas a los centros escolares y a través de los centros sanitarios.

Además de ser monitorizados para evaluar la posible aparición de signos o síntomas de infección por la COVID-19, se registrarán las variables demográficas, clínicas, dietéticas, ambientales, psicoeducativas y socio-económicas de este grupo de niños/as.

Durante el estudio, el equipo del IATA tomará muestras de heces y de saliva para realizar el análisis de biomarcadores en la población en edad escolar, para poder predecir el riesgo de infección y controlarlo mejor.