Que el bosque no nos impida ver los árboles

Artículo de opinión de Esquerra Unida Paiporta.

Se está celebrando en Madrid la Cumbre del Clima. En la misma, casi con toda seguridad, se hablará de «crisis climática», «emergencia climática», «consenso climático» y otros términos que ya suenan a repetidos. En ella llegarán a acuerdos y compromisos que, desgraciadamente, en su mayoría quedarán en papel mojado.

Y esto ocurrirá si, en primera instancia, y como entidades más próximas a la ciudadanía, los municipios no acometen medidas drásticas, sin paliativos; sí, drásticas para frenar esta terrible agresión que sobre el medio ambiente nos infringe el sistema capitalista globalizador.

Paiporta es un municipio adherido a la Red Española de Ciudades por el Clima que está promovida y al amparo de, entre otras entidades supranacionales, la Federación Española de Municipios y Provincias. Paiporta, como tal miembro, se comprometió en sesión plenaria a bajar sustancialmente la huella de carbono por emisión de gases de efecto invernadero.

Aquel que aparenta ser un título rimbombante carecerá de fundamento si, por ejemplo no se pone en valor un aspecto tan básico y con un carácter tan patrimonial como la recuperación de la huerta que circunda su casco urbano.

Paiporta cuenta con un término municipal de unos escasos 3,9 kilómetros cuadrados, de ellos, tan solo el 35%, unas 141,99 hectáreas aún son espacio protegido como zona de huerta. Pero en concreto, hay una lengua de tierra comprendida entre la CV-400 y los términos de Benetússer y Alfafar que se encuentran en un lamentable y alarmante proceso de deterioro y degradación. Un número importante de talleres, que de forma irregular ocupan gran parte de este espacio, permanecen todavía allí, agrediendo a la huerta en particular y al medio ambiente por extensión, sin que el consistorio haya acometido aun las acciones necesarias para, en aplicación de la Ley 5/2018, de 6 de marzo, de la Generalitat Valenciana, de l’Horta de València, revertir esta situación y cumplir con esta ley que en su artículo primero nos obliga a preservarla, recuperarla y dinamizarla, haciéndola más sostenible y resiliente a los efectos de cambio climático.

Una de las acciones más urgentes, de entre otras, que hay que implementar en esta zona de la huerta de Paiporta es la de no conceder más licencias a nuevas actividades empresariales agresivas, ya sea directamente por su dinámica o indirectamente por los servicios de los que dependan, como por ejemplo el tránsito de vehículos de gran tonelaje.

Otras alternativas encaminadas en la creación de empleo sostenible son factibles, como las vinculadas a las propias de la agricultura y la preservación patrimonial, etnológica y cultural de nuestro territorio. Es necesario formar y fomentar a nuevos agricultores de la zona para hacer realidad los productos de proximidad.

Esquerra Unida Paiporta.