¿QUIÉN (DES) PROTEGE A JUANA RIVAS Y A DANIEL?
Laura García Guardado
Promotora de Igualdad, Feminista y Coeducadora
La vergüenza que siento por la (des)gobernanza judicial que rodea a las mujeres en España, es diametralmente coincidente a la que se somete a sus hijas e hijos.
¿Nadie puede parar esta barbarie? ¿Nadie?
Estoy leyendo artículos con pronunciados sesgos machistas, que acusan con el “falso SAP” a Juana, potenciando el mito de la “madre perversa” y el estereotipo de la “mala madre”.
¿Por qué lo llaman manipulación cuando se trata de protección?
Los responsables son todos esos libelos con patente de corso para maltratar mediáticamente a una madre, infantilizar el discurso de un menor y suponerle manipulado por su madre y su hermano.
Sin embargo, volvemos a ver el polvo del camino que levanta la inmediatez de la (in)justicia cuando se revuelve de nuevo contra Juana, acusándola de sustracción de menores.
Mientras que ella recoge su corazón hecho pedazos, el de Daniel queda destrozado cuando suplica que se le escuche y la jueza Cristina Luis Vílchez del Juzgado de Primera Instancia N.º 3 de Granada, se niega a hacerlo, parece que se vela más por el interés y los derechos del pater familias¿no?… se llama Violencia Institucional.
«No puedo elegir, quiero que me deje en paz de una vez… Me va a matar si vuelvo, me va a matar».
¿Por qué nadie considera la opinión de Daniel, como un ser humano con raciocinio propio construido por su mal vivir?
Les voy a hacer una pregunta, y piénsenla bien, porque está es de las que se queda en la conciencia: ¿y si el “presunto maltratador” de Daniel, de su hermano y de su madre consiga el fin que tenga en mente? Porque siempre tienen un fin, siempre. Nos llaman locas a las feministas; pero que poquito nos equivocamos… oigan y lo mal que nos sentimos de tener después razón.
¿Y si el próximo 18 de septiembre condenan por maltratocontinuado física y psicológicamente con amenazas de muerte contra Daniel a Francesco Arcuri? Su hermano escapó de la misma situación con 16 años. España ignora ahora, la medida cautelar de enero que protegía a Daniel, atención al dato, medida adoptada en España.
Se Incumple el Artículo 11. Derecho de las víctimas a ser escuchadas, de la Ley Orgánica 8/2021, de 4 de junio, de protección integral a la infancia y la adolescencia frente a la violencia.
Se vulneran Derechos consagrados en nuestra Carta Magna: Art. 14, la igualdad ante la ley de españolas y españoles; Art. 24. Derecho a una tutela judicial efectiva.
El Derecho a la reparación, art. 2 b) de la CEDAW.
Y el art. 13 del Convenio de la Haya, nos dice que el Estado no está obligado a la restitución del menor cuando exista un grave riesgo de exposición a un peligro físico o psíquico.
Falta perspectiva de género con Juana Rivas.
Faltó perspectiva de género y se les llevó a una situación de riesgo, para comprobar si realmente existía ese riesgo con Ángela González Carreño y su hija Andrea; con Ruth Ortiz, su hija Ruth y su hijo José; con Itziar Prats, sus hijas Nerea y Martina.
España ya ha sido condenada en varias ocasiones por la desprotección al menor, ¿es normal que las institucionescontinúen sin frenos y cuesta abajo por el mismo camino?
El maltrato continuado de Francesco Arcuri contra Juana a través de su hijo Daniel, ¿no les da ninguna pista?
Si después de leer este texto, sigue usted diciendo que “no soy ni machista ni feminista”, es machista; “No soy machista, pero…”, es machista.
Si les molesta lo que les estoy diciendo, imagínense como nos sentimos las mujeres que lo sufrimos, escuchamos y padecemos en nuestra cotidianidad, todo tipos de violencias contra nosotras que estas frases siguen legitimando.
Denle una vuelta, la vida de las mujeres, sus hijas e hijos sigue en juego mientras ustedes se deciden.

