La periodista Maribel Vilaplana llega al juzgado de Catarroja para testificar por el 29-O

Maribel Vilaplana, la periodista que comió con el president de la Generalitat, Carlos Mazón, el 29 de octubre de 2024, el día de las inundaciones que causaron 229 muertos, ha llegado a las 9.03 horas a los juzgados de Catarroja, rodeada por una nube de periodistas y fotógrafos.

La periodista ha llegado en medio de una gran expectación pero no ha hecho ninguna declaración ante los periodistas, todo ello en medio de un gran despliegue de seguridad por parte de la Guardia Civil.

Vilaplana está citada como testigo a las 9.30 horas ante la jueza que instruye la causa penal por la gestión de la dana, según dictaminó la Sección Segunda de la Audiencia de Valencia, para «ofrecer detalles o matices que pudieran resultar de interés para la investigación».

Maribel Vilaplana, la periodista que comió con Carlos Mazón el día de las riadas, ha asegurado en su declaración ante la jueza que instruye la causa penal por la gestión de la dana que el president atendió llamadas y mensajes, pero que no recuerda haber escuchado sonar su teléfono.

¿Qué pasó durante la comida?

Vilaplana ha asegurado, en calidad de testigo en el juzgado de Catarroja, que durante la comida el president escribía mucho por el móvil, y que en algún momento de la comida hubo muchas llamadas.

Ante la insistencia sobre esta cuestión ha señalado que Mazón no estuvo incomunicado, que si ella hubiese oído sonar el teléfono le hubiese dicho al president que lo cogiese, de modo que, si sonó y no lo cogió, pudo ser que lo colgase.

Ella propuso al president salir del reservado para que éste hablase, si bien él le dijo que no era necesario, aunque Mazón se levantó de la mesa al menos en una ocasión para hablar con la entonces consellera de Interior Salomé Pradas a las 17:37 horas, ha explicado, según las fuentes del caso presentes en su declaración.

La periodista ha admitido que durante la comida recibió un enlace de un vídeo de las inundaciones que sufría Utiel desde primera hora de aquella jornada -17:39, momento en que Mazón estaba hablando con Pradas-, pero ha insistido en que no abrió el vídeo y que, por tanto, no pudo compartir esa información con el president.

El hecho de no haber abierto ese tuit es algo que le «atormenta», ha declarado.

En general, Vilaplana ha afirmado que recuerda haber escuchado «poco» a Mazón hablar por teléfono, que estaría más «escuchando que hablando». Ha señalado además que el president no le transmitió ninguna información sobre las conversaciones que mantenía y que, en ningún caso oyó nada sobre dana, Cecopi o lluvias.

Cuando se reunieron, a partir de las 15 horas, Mazón le dijo que venía de un encuentro con los sindicatos, y a ella no le dijo «nada» de la dana.

En València, según ha recordado en su declaración, no llovía y ella no tenía la percepción de que pasase «nada», así como que en la universidad donde estudia su hija no se suspendieron las clases. 

Comida con Mazón

La periodista, que estuvo con el president de la Generalitat hasta, al menos, las 18:45 horas, tendrá que responder concretamente sobre «el proceso seguido la tarde del 29 de octubre en la toma de decisiones, el cual es objeto de la investigación penal en curso» en el juzgado de Catarroja.

Vilaplana fue atendida el pasado sábado en un centro hospitalario tras sufrir un cuadro de ansiedad, si bien regresó a última hora del día a su domicilio.

Su citación fue inicialmente denegada por la jueza instructora, pero la Audiencia Provincial de Valencia la corrigió por considerar que puede «ofrecer detalles o matices que pudieran resultar de interés para la investigación» y concretamente sobre «el proceso seguido la tarde del 29 de octubre en la toma de decisiones, el cual es objeto de la investigación penal en curso».