Los secretos ocultos del mar de l’Horta

A 10 minutos navegando desde el puerto deportivo de La Pobla de Farnals, entre las playas de Massalfassar y Massamagrell, se encuentra hundida una draga. Su historia comienza durante la guerra civil española, el buque estaba amarrado en el puerto de Valencia cuando le cayó una bomba y se hundió.

“Al tiempo, se reflotó y pasó a convertirse en buque de la armada que hacía las labores de transporte de mercancías. Con los años, un empresario gallero lo adquirió y trabajando en las aguas de la comarca el barco se hundió de nuevo, primero parcialmente y luego completamente”, explica Ricardo Giménez, responsable del club Buceo Valencia.

Desde entonces permanece en las aguas de la comarca y se ha convertido en un reclamo para buceadores, “es impresionante el barco sobre todo por la vida que habita en él. Hay muchas especies, se ha convertido, con el paso de los años, en un arrecife artificial”.

El barco tiene una longitud de 60 metros, pero está fraccionado en tres partes. “Toda la zona ocupa una extensión de 150 metros”.

Desde la lejanía de la playa, una boya negra indica que el barco está justo debajo. Su cubierta está a una profundidad de 4,5 metros mientras que la profundidad máxima del buque es de 11 metros.
“A la gente le encanta ver el barco, sobre todo por las especies que habitan. Hay hasta estrellas de mar. Por eso nosotros hemos pedido a las administraciones que lo declaren reserva natural porque algunos barcos se ponen justo encima del buque para pescar”.

Este no es el único barco que se encuentra en las playas de la comarca, entre Puçol y Sagunto, descansa en el fondo del mar SS Coila. “Ahora se cumple 104 años hundido”, explica Ricardo Giménez, “fue un submarino alemán y está totalmente cerrado. Se encuentra a 30 metros de profundidad”.

Ánforas
“La costa de la comarca se encuentra entre dos puertos históricos: el puerto de Valencia y el puerto de Sagunto es por eso que es habitual encontrar ánforas o cuellos de botellas”, explica Ricardo Giménez.

Hace tres años un grupo de buceadores sacaron de la playa del Puig un ánfora ibérica en perfectas condiciones. Se trata de una zona donde, según el historiador del Puig, Julio Badenes, se encontraba también el puerto que Jaime I utilizaba para abastecer a sus tropas cuando estuvo en el castillo de la localidad.

Búnker
Otra de las curiosidades del mar del Puig es el búnquer de la guerra civil española que con el aumento del nivel del mar se ha quedado totalmente cubierto a unos 30 metros de la orilla. Está ubicado frente a la urbanización Plans Mar.

Muchos tesoros ocultos que como insiste el buceador, Ricardo Giménez, “lo que está en el mar, pertenece a él, y no se debe sacar, solo bucear y contemplar”.