Xirivella, Manises y Quart de Poblet plantan cara a AENA y se oponen a la ampliación del aeropuerto

Los Ayuntamientos de Xirivella, Manises y Quart de Poblet no han tardado en mostrar su rotunda oposición a la ampliación del Aeropuerto anunciada ayer por AENA.

En Xirivella, el equipo de gobierno junto con el resto de formaciones políticas han presentado por Registro de Entrada una moción, que se aprobará en el próximo pleno, en la que muestran su oposición unánime a la ampliación del aeropuerto. El portavoz del PP, Guillermo Garrido, ha explicado que “somos conscientes de que el turismo actualmente en la Comunidad Valenciana es un motor económico, pero el 40% de la zona residencial de Xirivella actualmente está afectada por la huella acústica”.

 

En el próximo Pleno “vamos a presentar una moción consensuada con todos los partidos a propuesta de la Federación de vecinos en contra de la ampliación de este aeropuerto porque Xirivella es un gran perjudicado y no queremos que nos sigan perjudicando con esa ampliación”, ha afirmado el portavoz que se ha mostrado “sorprendido” ante el anuncio que ha hecho AENA de la ampliación de los aeropuertos de Manises y el Altet “sin conocer la opinión de los municipios que estamos afectados por la huella acústica de este aeropuerto”.

 

Por su parte,  el alcalde de Manises, Javier Mansilla ha afirmado que “tenemos que actuar con prudencia y esperar a conocer el tipo de inversión incluida en el plan 2027-2031 de AENA, puesto que no existe espacio real para ninguna ampliación, ya que las instalaciones actuales ocupan ya el 17,76% de todo el término municipal” y ha recordado que “cuanto más crezca el aeropuerto, más aspectos negativos sufrirá la población de Manises ya que habrá más contaminación, más ruido y menos oportunidades de crecimiento económico”.

 

En la misma línea, la alcaldesa de Quart de Poblet, Cristina Mora, ha manifestado que “nuestra posición es muy clara: nos oponemos a cualquier decisión que suponga un aumento del tráfico aéreo que afecte a Quart de Poblet. No estamos en contra del progreso ni del turismo, pero no a cualquier precio y nunca en contra de la salud y el bienestar de nuestros vecinos y vecinas».

 

Mora ha incidido en el hecho de que en Quart de Poblet ya sufren muchas limitaciones para tener un aeropuerto al lado, «ya pagamos un precio bastante alto. No solo es el ruido de los aviones, o el gasto energético derivado de tener que cerrar las ventanas en pleno verano, son las restricciones de crecimiento, y las zonas de servidumbre que nos impiden desarrollarnos».